PADRE MELVIN DOUCETTE
Miércoles 25 de enero de
2012
“La Conversión de
Pablo."
Por
favor leed acerca de la conversión de Pablo en Los Hechos de los Apóstoles 9,
1-19:
“Saulo, respirando
amenazas de destrucción contra los discípulos del Señor, se presentó al sumo
sacerdote y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco para que, si hallaba
algunos que siguiesen ese camino, tanto hombres como mujeres, los condujese
atados a Jerusalén. Andando su camino,
sucedió que, al acercarse a Damasco, de repente se vio rodeado de una luz del
cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz
que le decía: -‘Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?’. Él contestó: -‘¿Quién eres, Señor?’. Y Él: -‘Yo soy Jesús, a quién tú
persigues. Pero levántate y entra en la
ciudad, y se te dirá lo que has de hacer.’
Los hombres que le acompañaban se habían quedado atónitos oyendo la voz,
pero sin ver a nadie. Saulo se levantó
entonces de tierra, pero abriendo los ojos, no veía nada. Le llevaron de la mano y le introdujeron en
Damasco, donde estuvo tres días sin ver y sin comer ni beber.
Había en Damasco cierto
discípulo, de nombre Ananías, y le dijo en visión el Señor: -‘Ananías’. Él contestó: -‘Heme aquí, Señor.’ Y el Señor a él: -‘Levántate y vete a la
calle llamada Recta y busca en casa de Judas a uno que se llama Saulo de Tarso,
que está orando. (Vio Saulo en visión un
hombre llamado Ananías que entraba y le imponía las manos para que recobrase la
vista). Respondió Ananías: -‘Señor, he
oído a muchos acerca de ese hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en
Jerusalén. Y que está aquí con poderes
de los príncipes de los sacerdotes para arrestar a todos los que invocan tu
nombre.’ Pero le dijo el Señor: -‘Anda,
porque éste es para mí instrumento de elección, destinado a llevar mi nombre
ante las naciones y los reyes y los hijos de Israel. Yo le mostraré cuánto habrá de padecer por mi
nombre.’
Fue Ananías y entró en
la casa, e imponiendo las manos, le dijo: -‘Saulo hermano, me ha enviado el
Señor, Jesús, que se te apareció en el camino que traías, para que recobres la
vista y seas lleno del Espíritu Santo.’
Y al punto se desprendieron de sus ojos unas como escamas y recobró la
vista; y levantándose, fue bautizado,
tomó alimento y se repuso.” [...]
Queridos amigos,
(A continuación
encontraréis el mensaje de Nuestro Señor y Redentor entregado al padre
Melvin. Jesús le dijo estas palabras:)
-“Regocijaos, Mi hermano
Melvin y todos Mis hermanos que vivís en cada país del mundo. Venid y uníos a la fiesta de la conversión y
bautismo de Mi gran Apóstol, San Pablo.
Antes de su conversión él no creía en Mí sino que trataba de destruir Mi
Iglesia. Sin embargo, cuando iba camino
a Damasco, lo derribé, le di una gracia muy especial y se convirtió. Fue bautizado y se transformó en Mi gran
Apóstol. Viajó a lo largo del mundo
conocido predicando la Buena Nueva que Yo le había dado a la Iglesia. Al final, murió en Roma una muerte de
mártir. Ahora es un gran santo en el
cielo.
Os exhorto a todos a
amar a San Pablo y a leer las numerosas cartas que escribió. Recibió inspiración para escribir y todo lo
que escribió es verdad. Así como él fue
Mi discípulo, os exhorto a creer en Mí como San Pablo y a no temer demostrarle
a la gente que Me amáis y que creéis en Mí con todo vuestro corazón. San Pablo es un gran ejemplo para vosotros. Os amo.”
Padre Melvin
P.D.: Por favor rezad
por mi primo, Albin, que está muriendo de cáncer. Siempre me quedo en su casa cuando voy a
Connecticut, Estados Unidos, en junio de cada año. Que el Señor os bendiga a todos.
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