“Pedro en la Casa de Cornelio"

The Rev. Fr. Melvin Doucette, African Missionary/ 1704 Palmer Road, RR 2

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PADRE MELVIN DOUCETTE

Viernes 26 de abril de 2013

“Pedro en la Casa de Cornelio"

(Lectura de los Hechos de los Apóstoles 10: 29b-43)

(Dijo Pedro) “-‘Decidme, pues, ¿por qué motivo me habéis llamado?’.  Cornelio contestó: -‘Hace cuatro días estaba yo a la hora de nona haciendo oración en mi casa, cuando de pronto se presentó delante de mí un varón vestido de refulgentes vestiduras, que me dijo: ‘Cornelio, ha sido escuchada tu oración, y tus limosnas recordadas delante de Dios.  Envía, pues, a Jope y haz llamar a Simón, llamado Pedro, que se hospeda en casa de Simón el curtidor, junto al mar.  Al punto, pues, envié por ti, y tú te has dignado venir.  Ahora, pues, todos nosotros, en la presencia de Dios, estamos dispuestos a escuchar todo lo que te ha sido ordenado por el Señor.’

Pedro comenzó a hablar, diciendo: -‘A la verdad entiendo ahora que no hay en Dios acepción de personas, sino que en toda nación el que le teme y practica la justicia le es acepto.  Él ha enviado su palabra a los hijos de Israel, anunciando la buena nueva de la paz por Jesucristo, que es el Señor de todos.  Vosotros conocéis lo que ha sucedido en toda Judea, comenzando por Galilea, después del bautismo predicado por Juan;  cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, el cual pasó haciendo bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con Él.  Y nosotros somos testigos de todo cuanto hizo, en la tierra de los judíos y en Jerusalén;  y de cómo le dieron muerte colgándole en una cruz.  Dios le resucitó al tercer día y le dio manifestarse visiblemente, no a todo el pueblo sino a los testigos elegidos por Dios de antemano, a nosotros, que comimos y bebimos con Él después de resucitado de entre los muertos.  Y nos ordenó predicar al pueblo y atestiguar que por Dios ha sido constituido juez de vivos y muertos.  De Él dan testimonio todos los profetas, de que todo el que cree en Él recibe por su nombre la remisión de los pecados.”

Queridos amigos:

         Ayer tuvimos un día lindo, con poca lluvia y soleado casi todo el tiempo.

(A continuación encontraréis el mensaje de Nuestro Señor, el Hijo de Dios, entregado al Padre Melvin.  Jesús le habló con estas palabras:)

         “Mi hermano Melvin y todos Mis hermanos dispersos por el mundo, estáis llamados a escuchar y leer los escritos de los Apóstoles porque son Mis testigos.  Estuvieron conmigo durante tres años, escucharon todas Mis enseñanzas y vieron todos los milagros que realicé.  Fue difícil para ellos aceptar que sería colgado en la cruz para morir, pero Me vieron cuando la policía del templo Me arrestó.  Tres días después de Mi muerte resucité, y en la tarde de ese día Me aparecí a la mayoría de los Apóstoles que, por supuesto, estaban atemorizados pero luego Me aceptaron.  Se dieron cuenta de que otro milagro había ocurrido: Mi Resurrección.

Estuve con los Apóstoles por cuarenta días después de Mi Resurrección para ayudarlos en su fe y para terminar las enseñanzas que tenía que darles.  Estuvieron presentes en Mi Ascensión en la colina.  Les había dicho que permanecieran en Jerusalén y que pronto recibirían el Espíritu Santo.  Por ser uno de Mis testigos importantes, envié a San Pedro a Cornelio para que le enseñara a él y a su familia acerca de Mí.  Una vez hecho esto, recibirían el Espíritu Santo y serían bautizados.  Todo esto, amados amigos, es para enseñaros a renovar vuestro compromiso conmigo y para que Me pidáis que os envíe otra vez el Espíritu Santo.  Puede venir sobre vosotros muchas veces en vuestra vida.  Os bendigo a todos.”