“Acusación de Debilidad."

The Rev. Fr. Melvin Doucette, M. Afr/ 1704 Palmer Road, RR 2

Tignish, PE (Prince Edward Island) COB 2BO / CANADÁ

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PADRE MELVIN DOUCETTE

Domingo 15 de julio de 2012

“Acusación de Debilidad."

Lectura de la Segunda Epístola de San Pablo a los Corintios 10, 1-11:

“Yo mismo, Pablo, os ruego por la mansedumbre y la bondad de Cristo;  yo, que soy humilde entre vosotros, pero que ausente me atrevo con vosotros, os ruego, que cuando esté presente no tenga que atreverme, con la energía con que pienso obrar resueltamente, contra aquellos que consideran nuestra conducta como si fuese dirigida por motivos carnales.  Porque, si bien caminamos en la carne, no militamos según la carne;  pues las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en manos de Dios para derribar fortalezas.  Con ellas desbaratamos los sofismas y toda altivez que se yergue contra la ciencia de Dios, y sojuzgamos toda inteligencia reduciéndola a la obediencia debida a Cristo;  y estamos dispuestos a vengar toda desobediencia, una vez que fuere completa vuestra obediencia.

Mirad las cosas como están ante vosotros.  Si alguno presume ser de Cristo, piense esto a su vez: que como él es de Cristo, así también nosotros.  Pues, aun cuando me gloríe un poco demasiado de nuestra potestad, recibida del Señor para edificación y no para destrucción vuestra, no me quedaré avergonzado.  Para que nadie se imagine que quiera intimidaros con las cartas.

Porque ‘las cartas (hay quien dice) son graves y fuertes; pero la presencia del cuerpo es poca cosa, y la palabra no vale nada’.  Piense ese tal que cuales somos ausentes por las cartas, tales seremos también presentes con la obra.”

Queridos amigos,

Ayer vino una buena cantidad de gente al Pequeño Santuario de Nuestra Señora de la Isla del Príncipe Eduardo.  Vinieron a pedir oración y también para rezar.  Le pedí a Jesús por sus necesidades, por intercesión de Nuestra Madre Santísima.

(A continuación encontraréis el mensaje de Nuestro Señor y Salvador  entregado al padre Melvin.  Jesús le dijo estas palabras:)

“Te bendigo, Mi hermano Melvin, y bendigo a todos Mis hermanos que viven en cada país del mundo.  Abridme vuestro corazón para que os entregue todos los dones y gracias que necesitáis.  A veces, cuando la gente se niega a hacer lo que les pido, debo ser severo con ellos.  A causa de su rechazo a Mí, su Salvador, podrían sufrir enfermedad, depresión, insultos, etc.  Si estuvierais conmigo en esos momentos, estaría allí para ayudaros y fortaleceros, pero si Me rechazáis estáis solos y eso puede resultar desolador.  No, amigos Míos, aceptadme como vuestro ayudante y amigo que quiere estar cerca de vosotros.  Todos enfrentan problemas y dificultades y no es fácil manejarlos solos.  No Me desobedezcáis sino que estad dispuestos a hacer todo lo que os pido.  Seréis recompensados y estaréis libres, con alegría y con paz.  Rezad e iré a vivir en vuestro corazón cada día.  Mi gran deseo es que un día estéis en casa conmigo en el cielo: allí estaréis en la felicidad eterna y nunca más tendréis que enfrentar el sufrimiento.  Os bendigo a todos.”

Padre Melvin