“La Primera Carta de San Pedro"

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PADRE MELVIN DOUCETTE

Martes 26 de febrero de 2013

“La Primera Carta de San Pedro"

(Lectura de la Primera Carta de San Pedro 1: 1-9)

“Pedro, apóstol de Jesucristo, a los extranjeros de la dispersión en el Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia, elegidos según el previo conocimiento de Dios Padre, en la santificación del Espíritu, para la obediencia y la aspersión de la sangre de Jesucristo: la gracia y la paz abunden en vosotros.

Bendito sea Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que, según su gran misericordia, nos reengendró a una viva esperanza por la resurrección de Jesucristo de entre los muertos, para una herencia incorruptible, inmaculada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, que por la virtud de Dios sois custodiados mediante la fe, para la salvación que está dispuesta para ser manifestada en el último tiempo.

Por lo cual os regocijáis, aunque sufriendo ahora por breve tiempo, si es necesario, diferentes pruebas, para que la prueba de vuestra fe, mucho más preciosa que el oro perecedero, aunque acrisolada por el fuego, sea hallada digna de alabanza, gloria y honor en la revelación de Jesucristo;  al cual, sin haberle visto, amáis;  en el cual ahora, sin verle, pero creyendo, os regocijáis con gozo inefable y glorioso alcanzando el fin de vuestra fe, la salvación de las almas.”

Queridos amigos:

         Ayer tuvimos un día lindo con la temperatura superior al punto de congelación.

(A continuación encontraréis el mensaje de Nuestro Señor, el Hijo de Dios, entregado al Padre Melvin.  Jesús le habló con estas palabras:)

         “Os bendigo, Mi hermano Melvin y todos Mis hermanos que vivís en cada país del mundo.  Antes de morir en la cruz, elegí a San Pedro para ser la cabeza de Mi Iglesia.  Fue el primero de los 12 Apóstoles.  Le di todas las gracias necesarias para gobernar Mi Iglesia y, al final, murió mártir.  Fue crucificado en Roma con la cabeza hacia abajo.  Es un gran santo en el cielo.  Escribió una carta maravillosa sobre Mí y especialmente sobre su fe en Mí.  Os exhorta a todos a creer en Mí, vuestro Salvador, que morí en la cruz.  Quiere que todos tengáis una viva esperanza en Mi resurrección de entre los muertos.  El objetivo de vuestra fe no es otra cosa que vuestra salvación para que podáis estar unidos a Mí eternamente en el cielo.  La verdadera fe la enseña Mi Iglesia construida sobre Pedro.  No aceptéis ninguna enseñanza que no sea aceptada por Mi Iglesia.  Hoy existen muchas enseñanzas falsas en el mundo.  Seguidme a Mí y a la Iglesia que fundé sobre San Pedro.  Os amo a todos.”

Padre Melvin