PADRE
MELVIN DOUCETTE
Jueves
14 de febrero de 2013
“Jesús ante el Sanedrín"
(Lectura del
Evangelio según San Lucas 22: 66-71)
“En cuanto se hizo de día se reunió el Consejo de los ancianos del
pueblo, los príncipes de los sacerdotes y escribas, y le llevaron a su
Sanedrín; y decían: -‘Si tú eres el Mesías, dínoslo.’ Él les contestó:
-‘Si os lo digo, no me creeréis; y si os pregunto, no me responderéis.
Pero a partir de ahora el Hijo del hombre estará sentado a la diestra del poder
de Dios.’ Dijeron todos: -‘¿Con que tú eres el Hijo de Dios?’. Él
les dijo: -‘Vosotros lo decís; yo soy.’ Dijeron ellos: -‘¿Qué
necesidad tenemos ya de testigos? Pues nosotros mismos lo hemos oído de
su propia boca’.”
Queridos amigos:
Ayer fue Miércoles de Cenizas, el comienzo de la Cuaresma. Recibí las cenizas
y supongo que vosotros también. Estamos llamados a seguir a Jesús al
desierto. Pasó cuarenta días en el desierto sin comer y esto señala el
hecho de que los judíos pasaron cuarenta años en el desierto después de salir
de la esclavitud en Egipto. Estamos llamados a estar en el desierto
durante cuarenta días para arrepentirnos de nuestros pecados y regresar a
Jesús, Nuestro Señor y Salvador. Recemos todos los días en este tiempo de
Cuaresma.
(A continuación encontraréis el
mensaje de Nuestro Señor, el Hijo de Dios, entregado al Padre Melvin.
Jesús le habló con estas palabras:)
“No temáis mostrar vuestra fe en Mí, Mi hermano Melvin y todos Mis
hermanos que estáis bautizados y Me seguís. Fui arrestado por los líderes
judíos y llevado primero ante el tribunal religioso llamado el Sanedrín.
Contesté sus preguntas y les dije especialmente que era el Hijo de Dios.
Los líderes no Me creyeron y usaron Mi respuesta para llevarme ante Pilato para
que Me condenara a muerte.
Hoy muchos de los que creen en Mí sufren porque hay mucha gente que está
contra Mí. Han rechazado Mi Iglesia y todo lo que hice cuando estuve en
la tierra. Sin embargo, no os preocupéis por los que siguen a Satanás
sino que permaneced unidos a Mí y seréis bendecidos. Os llevaré un día
conmigo al cielo. Durante este período de Cuaresma, Me gustaría que todos
contemplarais Mi sufrimiento, que padecí por amor a vosotros para expiar
vuestros pecados. Estoy siempre dispuesto a ayudaros si acudís a Mí y Me
pedís ayuda. Os bendigo a todos.”
Padre Melvin
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