“Hijos de Dios"

The Rev. Fr. Melvin Doucette, African Missionary/ 1704 Palmer Road, RR 2

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PADRE MELVIN DOUCETTE

Lunes 18 de marzo de 2013

“Hijos de Dios"

(Lectura de la Primera Epístola de San Juan 2: 28-29, 3: 1-10)

“Y ahora, hijitos, permaneced en Él (Jesús), para que, cuando se manifieste, tengamos confianza y no seamos avergonzados por Él en su advenimiento.

Si sabéis que Él es justo, sabed también que todo el que obra la justicia, es nacido de Él.

Mirad qué señal de amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios, como lo somos.  Por eso el mundo no nos conoce a nosotros, porque no le ha conocido a Él.  Carísimos, ahora somos hijos de Dios, y todavía no se ha manifestado lo que seremos;  sabemos que, cuando se haga manifiesto, seremos semejantes a Él, porque le veremos tal como es.  Y todo el que tiene esta esperanza en Él, se purifica a sí mismo, como puro es Él.

Todo el que obra el pecado, traspasa la ley, porque el pecado es la violación de la ley.  Y sabéis que Él se manifestó para quitar los pecados, y en Él no hay pecado.  Todo el que permanece en Él, no peca;  todo el que peca, no le ha visto ni le ha conocido.

Hijitos, que nadie os engañe: quien obra la justicia es justo, como Él es justo;  quien obra el pecado, procede del diablo, porque el diablo peca desde el principio.  Para esto se manifestó el Hijo de Dios, para destruir las obras del diablo.  Todo el que ha nacido de Dios no peca, porque el germen de Dios permanece en él, y no puede pecar, porque ha nacido de Dios.  En esto se conocen los hijos de Dios y los hijos del diablo. Todo el que no obra la justicia no es de Dios, y tampoco el que no ama a su hermano.”

Queridos amigos:

         Ayer, domingo, tuvimos un día muy lindo.  Estuvo soleado toda la mañana sin una nube en el cielo.  Se nubló un poco por la tarde.

(A continuación encontraréis el mensaje de Nuestro Señor, el Hijo de Dios, entregado al Padre Melvin.  Jesús le habló con estas palabras:) 

         “Sois hijos de Dios, Mi hermano Melvin y todos Mis hermanos que conocéis al Padre y Le seguís.  Los hijos de Dios reciben gracias especiales de Dios para permanecer cerca de Él y evitar el pecado.  Vine al mundo porque todos los pueblos del mundo eran pecadores.  Tomé vuestro lugar para pagar por vuestros pecados a través de Mi sufrimiento y muerte en la cruz.  Creed en Mí y arrepentíos de todos vuestros pecados y verdaderamente seréis hijos de Dios.  Tendréis la gracia entonces para evitar el pecado y seréis amados por el Padre y por Mí, vuestro Salvador y Hermano.  Os cuidaré cada día y nunca estaréis solos.  Mi Madre también está rezando por vosotros y canalizando todas las gracias que debéis recibir.  Abrid vuestros corazones, amados amigos, y seréis bendecidos.  Vivid unidos a Mí y a todos vuestros hermanos.  Os amo a todos.”

Padre Melvin